La japonesa Mazda se ha erigido siempre como una de las marcas automovilísticas que más prototipos diseña y desarrolla con efectividad de todo el mundo, si bien muchos de ellos no resultan más que un mero ejercicio de diseño. La presentación en Detroit del nuevo Mazda RX-8, una pequeña renovación del deportivo nipón que algunos ya esperaban con bastante ansia, se hace de forma paralela a la de este concepto deportivo biplaza: Furai.
Según la propia Mazda, el Furai es la “materialización del Zoom-Zoom”. Aparentemente tiene líneas de superdeportivo bajo, con cierto parecido al también prototipo Taiki y lejos de las líneas compactas que suelen caracterizar a muchos de los prototipos de Mazda. No obstante, sus líneas de coche de competición no están diseñadas en vano, puesto que incorpora un novedoso sistema de propulsión que utiliza únicamente etanol como combustible y que está basado en un motor rotativo de tres rotores. Mazda quiere que este motor se convierta en el primer rotativo que compite en carreras oficiales, aunque de momento se encuentra experimentando con otros combustibles como el E10.[+]
No hay comentarios:
Publicar un comentario